¿Qué es el Poliamor?
A
diferencia de lo que muchas personas suelen pensar, el poliamor no consiste simplemente en la tolerancia a la infidelidad
o una justificación de esta última, definitivamente se trata de algo mucho más
complejo. Por definición, el concepto del poliamor
implica una relación simultánea de tres o más individuos en donde cada uno de
estos son conscientes de que su pareja o parejas no tienen algún tipo de
exclusividad afectiva y/o sexual con una sola persona. Por supuesto, aunque a
simple vista se pueda entender como una forma de liberarse de las normas
conyugales y sociales que una relación monogámica pueda acarrear, el poliamor representa un cuestionamiento
al determinismo amoroso planteado por una relación monogámica “tradicional”. El
cual, según Santiago (2018), no ofrece más que dos opciones: la felicidad
asociada al amor en pareja (que lleva implícito valores y conductas como la
fidelidad y los celos) o la infelicidad asociada a la soledad y el desamor (que
trae consigo repercusiones sociales al ser considerado como un individuo que no
tiene la capacidad para tener una pareja).
Es
así que el poliamor se ha planteado
como un modelo alternativo a la forma hegemónica de relacionarse (muchas veces
transmitida como natural e inherente al ser humano), la cual encuentra soporte
en una lógica de posesión, exclusividad y otros supuestos de la monogamia.
(Aldana, 2017). Por supuesto, es importante mencionar que el poliamor solamente
representa un espectro dentro de la variada gama de modelos no monogámicos
denominada como formas del amor libre (o
del libre amor).
¿Por qué y cómo se da una relación poliamorosa?
Para no ahondar mucho en este aspecto, se puede decir que las relaciones de libre amor (entre ellas las poliamorosas) surgieron para oponerse a los principios básicos de la "heteronormatividad" que privilegian a la monogamia como un sistema que está más relacionado a pautas sociales y económicas, que favorecen el funcionamiento de la sociedad capitalista, que a cuestiones como la fidelidad y el romance. En resumen, y dicho a grosso modo, la ideología del amor romántico se preocupa más por la perpetuación del sistema (estructura social, derecho, posesión, propiedad privada, etc) que por el amor y el romanticismo en sí.
No solamente es el capitalismo el que se ve beneficiado por la ideología del amor romántico, sino también el patriarcado; puesto que muchas de sus prácticas otorgan una clara ventaja al varón sobre la mujer en torno a la relación. En palabras de Simpére (2011):
Por ser el modelo esperado y aprobado socialmente, tiene la fantasía de la estabilidad, no es blanco de censura, reprobación, duda o desconfianza ante extraños, permite conservar los beneficios aun saliéndose de él con discreción en encuentros casuales.
Es en este sentido que se puede afirmar que una relación poliamorosa se da por el anhelo de alcanzar experiencias afectivas plenas que no podrían ser alcanzadas a través del modelo monogámico.
¿Libertad o libertinaje?
Cabe
recalcar que no existe una única definición de lo que es el poliamor; sin embargo, en todas las
versiones aparecen características en común. La honestidad, la responsabilidad,
la comunicación, la ética y la no posesión son los principales valores que esta
filosofía profesa. Básicamente, se enfatiza la idea en la cual cada quien
decide a cuántas y cuáles personas quiere aceptar, previo consenso, en vez de
acatar la norma social de amar a una sola persona a la vez.
Visto
desde otra perspectiva, una diferencia interesante entre las relaciones
monogámicas y las no-monogámicas es el tiempo; puesto que es común que cuando
una relación monogámica no funciona, con el tiempo se inicia otra con una nueva
persona (se ama a alguien más). Tanto la relación monogámica como el poliamor comparten una intención de
compromiso, la diferencia radica en la formalidad que atañen las normas
sociales.
Para
finalizar, muchos autores conciben al poliamor
como “la práctica de negociar consensuadamente con interés y compromiso en
más de una relación” lo que no necesariamente implica la pasión sexual puesto
que múltiples relaciones poliamorosas se basan solamente en un vínculo afectivo
fuerte. Es en este sentido que difiere notoriamente con otras clases de
interacción sexual/romántica como la poligamia.
A manera de conclusión: ¿Cómo se concibe el poliamor en el Perú?
Aunque
todavía es complicado hablar abiertamente sobre el poliamor y otros tipos de relación de “libre amor” en el Perú dada
la naturaleza aún conservadora de su sociedad, no me cabe lugar a dudas que
este concepto implica una reformulación del significado de palabras como
fidelidad y compromiso. En lo personal, me interesa saber cómo es que este
fenómeno afectará la concepción de los celos en un futuro próximo, ya que estos
normalmente suelen ser utilizados (no solamente en el Perú) como un mecanismo
para defender lo que se considera propio en el caso de la monogamia y no tienen
cabida en el plano del poliamor.
Referencias bibliográficas:
Aldana A. (2017). Del poliamor y otros demonios. Universidad Nacional de Colombia, Alabao.
Rubio I. & Quintero M. (2019). Plataforma digital para la psicoeducación y la orientación psicológica del poliamor y la no-monogamia (trabajo de grado). Universidad Católica de Colombia, Bogotá.
Santiago L. (2018). El poliamor como construcción amorosa dialogada (tesis de maestría). Universidad de Almería. España.
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