Hoy en día vivimos en un mundo tan
globalizado que estamos pendientes constantemente de las redes sociales,
hacemos esto a la par con nuestras diferentes responsabilidades ya sean laborales,
familiares, académicas etc.
Hemos dejado de lado la importancia de pasar
tiempo con uno mismo, de encontrar esos momentos de escuchar nuestros
pensamientos, reflexionar y recargar energías.
Muchas personas pueden llegar a pensar que
este tiempo destinado para uno mismo es tiempo perdido cuando realmente ocurre
todo lo contrario. Si te sientes en armonía, transmites armonía; cuidarte
incrementa tu confianza, mejora tu autoestima, tu relación con el entorno y tu
bienestar. No necesariamente este tiempo para nosotros mismos está disponible
siempre; es responsabilidad nuestra crear este espacio y momento personal para
poder desligarnos de las distracciones externas.
Existen pequeños gestos que podemos realizar
y que nos harán sentir muy bien, un baño relajante, un paseo por la naturaleza,
un rato de meditación, unos masajes, comer saludablemente, leer un libro,
dormir lo suficiente o no hacer nada. La cuestión está en que lo que hagamos
sea para nosotros mismos, sintiéndonos plenos en ese momento, compartiendo con
nuestra voz interior.
Vivir constantemente en piloto automático,
siguiendo una rutina y el cumplir de nuestras responsabilidades es agotador
pero lo cierto es que, al salir por las calles vemos expresiones de desánimo en
los rostros de las personas, rostros agotados; es un malestar generalizado.
Vivimos en un país donde la inversión para la salud mental pública no es algo
que se dé. Sin embargo, la salud mental de las personas en la sociedad es
fundamental para un desarrollo adecuado de esta. Podemos empezar desde lo
personal cuidando de nuestro estado individual y así influyendo positivamente
en nuestro entorno cercano.
Con todas las obligaciones que el vivir nos
impone, nos hemos olvidado de que la vida hay que reflexionarla, disfrutarla,
vivirla…
CUIDARTE
NO ES UN LUJO ES UNA NECESIDAD
Este artículo fue realizado por Luz Marina Vidal Guardia
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